Mi Amigo Secreto

Entre todas las tradiciones que tenemos en diciembre se encuentra éste popular juego "el amigo secreto" donde la gente se compromete a dar y recibir regalos entre su grupo de amigos, compañeros de trabajo, clases o familia que se animen a jugar.

Recuerdo que la última vez que jugué fue hace como 10 años con las compañeritas de clases que llevaban tiempo estudiando conmigo, pero nunca falta aquella que siempre está donde no la llaman y es mas salida que *** (inserte la alusión a "gente entrometida" que mas le guste) y precisamente esa es la que me regalaba a mí o se suponía que lo hiciera, porque sólo recuerdo recibir el regalo final. He allí uno de los problemas que suelen suceder en este juego, pero eso no evita que la fiebre cada año regrese y pareciera que incuso con más fuerza, pues hay gente que no sólo juega con uno sino con todos los grupos que conozca.

Éste año rompí con la tradición (mía) de no jugar eso y me "animé" a aceptar la propuesta para meterme en el juego de mi grupo de compañeros de trabajo. De forma que no se puede decir que no hago el esfuerzo por adaptarme a la euforia que envuelve a todos en estas fechas. En principio las reglas (que pueden variar en cada entorno, según a lo que más le parezca a la mayoría y como se haga más sencillo el juego) eran:

Se daba un regalo semanal, según una categoría escogida el último día de la semana (viernes) y el regalo final que era el día de la fiesta navideña, oscilaría entre ciertos montos de dinero, aunque no limitaba para el caso de que se gastaran mas de esas cantidades. Los regalos iban a ser dejados en una caja destinada a ello e inicialmente ubicada en el sitio más accesible.

Sin embargo, todo el que haya jugado al menos una vez en su vida a ésto, sabe que no todo es color de rosa y no todo sale tan bien como uno espera. Este año y con éste grupo no fue la excepción y se dieron varios Casos:





Caso 1: En grandes grupos, como ya medio comenté, la gente no se cae del todo bien o no todas son bien aceptadas por otras, aquí hay dos variantes. Puede que te toque regalarle o que te regale una de esas personas que no te agradan mucho y que simplemente o te den o des regalos que dejen mucho que desear (no precisamente por buenos), y puede que consigas a un/a amigo/a que quiera cambiar de amigo secreto contigo. Lo que más sucedió en esta ocasión fueron los cambios de papeles .

Quienes aceptaron sus amigos tal cual, sea por resignación, porque simplemente les daba igual o porque sí les gustaba la persona que les había tocado (éste era mi caso), no tuvieron problemas, pero... no me pregunten dónde, ni cómo los que se traspapelaron los amigos, lo hicieron mal y al momento de la primera entrega se dio el...

Caso 2: en la caja, dispuesta en un lugar visible y de fácil acceso, habían dobles regalos para 4 personas, lo que quiere decir que por lo menos 4 estaban dejando de recibir algún regalo. Lo curioso es que fueron más que 4 las que dejaron de recibir regalos y yo entraba en el grupo (pude haber pensado que mi "amigo secreto" me odiaba, pero el lío era de él/ella - que resolviera!). La primera solución fue pedir ayuda de alguien que no estaba jugando para que hiciera una lista con los respectivos amigos secretos de todos y así hallar dónde estaba el problema y quiénes eran los tracaleros. La segunda medida a tomar fue colocar la caja en un sitio más confiable y un poco menos accesible (por lo menos a todo el mundo) pero mejor vigilado, pues también se dio el...

Caso 3 : Hay personas que realmente se emocionan con éste juego y no les basta un sólo amigo secreto, sino que quieren dar más regalos de los debidos a otras personas a las que quieren mucho! (joder! - por lo general) o mejor dicho, gastarles algunas bromas.

Caso 4: Otras personas tienen ideas muy románticas del juego o en realidad son unas inconformes que necesitan decirle a los demás lo que quieren y lo que no, para ir por lo seguro. Entonces crearon una CARPETA T.A.S ( T.A.S = Tu Amigo Secreto) , en principio para colocar lo que cada quien quisiera recibir en el regalo de esa semana.

No es que yo esté en desacuerdo con que todos tenemos derecho a recibir regalos que nos gusten, pero tampoco es que crea que la idea del juego es estar cada semana escribiendo lo que quiero de regalo, como si fuese la carta del niño Jesús que nos ponían a hacer en primaria. Además ésta idea luego se transformó en la "carpeta de los lamentos y cumplidos" porque la gente comenzaba a dejar mensajes diciendo lo mucho que les habían gustado sus regalos o lo mala gente que era él que no le había regalado, etc.

Caso 5 : si hay algo que nadie me va a quitar de la cabeza es que al menos la mitad de las personas que lo juegan no tienen la menor intención de mantener el misterio y lo que quieren es hacer un poco el papel de detective y descubrir antes de tiempo a la persona que les regala. También ocurre que la gente no quiera o pueda guardar algún secreto y tenga que decirle a todo el mundo a quien le regalan o en el caso de saber los amigos secretos de otros, comunicarlos a todos los que puedan.

Caso 6 - Mi caso: en principio, la elección no fue mala, aunque me tocó una persona con la que no trato mucho, sé que es una persona muy alegre y echador de broma, es agradable, pero ¡qué difícil fue decidir qué regalarle! porque ni la gente que trata más con él sabía y no se le ocurrió usar la carpeta ni para insultarme!. Total que al menos le dí sus regalos como creí que le gustarían y echándole algo de broma también aunque me salté uno (el que más me costó y no logré dar con algo adecuado). El juego duraría 4 semanas así que serían 4 regalos de los que sólo recibí un regalo a las 2 semanas y media, que fue una película que ya tenía a pesar de que me cansé de decir que NO quería ninguna película porque seguro ya la había visto y bueeeeeh. Al menos me la dio con una nota que justificaba el regalo y me hizo no verlo tan mal.

El día del regalo final, estaba segura de que una mujer me regalaba, por lo "emotiva" de la carta que me había dejado en el único regalo que me había mandado. Yo compré el regalo el mismo día porque me habían averiguado lo que mi amigo secreto quería el día anterior en la noche. Llegué a tiempo para la entrega y sorpresivamente me terminó regalando un chico ( y ¡¡¡ qué Chico!!!! - *suspiro - *suspiro...), me dio justo lo que más quería y mi respectivo doble beso y doble abrazo - *suspiro *suspiro.

No es que tenía el sexto sentido dañado, sino que mi caso tuvo la particularidad de que mi amiga secreta, si era mujer, pero por causas mayores se retiró del juego. Entonces terminé heredando su amigo secreto y ¡Qué amigo!. Supongo que igual tengo que agradecerle el regalo final, que vino con galán incluido.

Después de todo, no fue tan malo.